Por: Sandra Muñoz
Si pudiera con mis palabras
tocar un corazón herido,
y ser bálsamo sanador,
si pudiera envolver en mis sentimientos
el dolor humano...
Si pudiera acompañar los gritos de dolor
del que sufre hoy,
y ser esa mano que sostenga su agonía,
si pudiera tocar el alma
del que llora...
Por las penas que sólo Dios consuela,
me convertiría en la almohada del triste
para calmar su pena.
tocar un corazón herido,
y ser bálsamo sanador,
si pudiera envolver en mis sentimientos
el dolor humano...
Si pudiera acompañar los gritos de dolor
del que sufre hoy,
y ser esa mano que sostenga su agonía,
si pudiera tocar el alma
del que llora...
Por las penas que sólo Dios consuela,
me convertiría en la almohada del triste
para calmar su pena.
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